EL AMOR DEL HOMBRE NO CORRESPONDIDO
Parte I
- ¿Por qué la
amas? Se preguntó un día el hombre no correspondido y empezó a escribir…
Yo la amo porque una vez ella fue una estrella
inalcanzable para mí, que finalmente pude tocar con mis manos. Porque ella, algunas
veces, me ha hecho sentir que soy mejor de lo que yo pensaba que era. Porque ha hecho
cosas por mí que ninguna otra ha hecho antes, a pesar de que su cariño era pequeñísimo, es más, tal vez no existía… Bueno, quizás no muchas cosas. La amo porque es
una buena mujer, de nobles sentimientos, sensible, de un carácter fuerte que no
se nota a simple vista y que siempre está interesada por los demás… Aunque creo
que por los demás un poco más que por mí. Porque sin considerar que ella es
hermosa y yo… no muy agraciado, lo cual, según predican no tiene importancia, y
aunque ella lo niegue somos muy similares, le gustan muchas de
las cosas que a mí me gustan y eso hace que tengamos cosas que compartir…
Pero, a decir verdad, las hemos compartido muy pocas veces. La amo porque ella confía en mí,
aunque también lo niegue y porque yo también confío en ella… En algunas cosas. Porque
a veces le comparto mis secretos, complejos y preocupaciones, los que no he
compartido con nadie y muestra cierto interés por ellos y yo he disfrutado
compartiéndolos con ella. La amo porque es alta… igual que yo, y yo siempre he querido
una mujer alta a mi lado, digna de mí, es decir, de mi estatura, además porque
me parece que ella será una buena madre. Porque le gusta el deporte y las actividades al aire libre y sé que eso, la mantendrá siempre saludable. Porque es ordenada y trata de ser responsable, aunque, por lo que
veo, un tanto menos de lo que aparenta. Porque es un poco tímida y reservada, como yo, pero de ninguna manera poco inteligente, es más, me parece que es muy
inteligente y capaz de resolver cualquier situación problemática que se le
presente, a pesar de que se deja llevar en ocasiones por la ansiedad y la
emoción… Sé también que eso precisamente no le agrada de mí, quiero decir, lo de ser tímido. La amo porque las pocas veces que he andado con ella por la calle he sentido
la sensación agradable de ser pareja y de hacer algunas cosas juntos, cosa que
no he sentido con ninguna otra mujer. Porque tiene un inusual y agradable
sentido del humor, porque irradia cierta gracia inexplicable que me envuelve y
hace que disfrute el estar con ella. Porque es dócil y en ocasiones un poco
complaciente y a veces, solo a veces, se preocupa por no hacer que yo me
sienta mal...
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